COMO ELLA DECÍA

«Siempre estoy a la altura del azar;para ser dueño de mí tengo que estar desprevenido.» — Friedrich Nietzsche Aquella mañana no necesitó madrugar porque ya tenía todo listo. Hacía una semana que había lavado toda su ropa, la planchó, le cosió su nombre a cada prenda, una por una. Armó dos pequeñas maletas, una con […]